¿Somos nosotras o julio ha pasado demasiado rápido? Tanto que hoy os contamos cómo nos ha ido con nuestros TBR. Hemos tenido lecturas muy interesantes y descubierto alguna que otra joya, aunque igual es por el calor, pero hemos hecho un poco lo que hemos querido:
Ana: bueno, yo este mes he dado un bajón importante respecto al ritmo que llevaba últimamente. Y tiene una explicación: libro tocho donde los haya. Pero no nos adelantemos. Comencé el mes con Tacones y Mazmorras, de Anabel García, un libro que me habían recomendado y que fue un tremendo chasco. La historia es entretenida, pero sin más.
En segundo lugar, empecé Los pilares de la Tierra, de Ken Follet. Y aquí empieza el declive. Sumado a que estuve unos días sin poder leer por diversos motivos, esta novela de 1358 páginas (se dicen pronto) tardé tres semanas en leerla. Y como yo no soy de leer varias cosas a la vez (solo me faltaba), pues hasta que no lo terminé no empecé otro. Eso sí, este libro fue una relectura que disfruté muchísimo.
Después leí el sexto tomo de La Blancanieves Pelirroja, de Sorata Akiduki, que me gustó mucho, para no variar, y termino el mes con La última paloma, de Men Marías. Esta lectura fue una colaboración con la autora, a la que le estoy tremendamente agradecida, porque la historia me encandiló. No entraba en mi TBR del mes, pero me apetecía leerlo y el resultado es que acerté con mi decisión.
💔 Con tan pocas lecturas, este mes solo puedo destacar uno y, desgraciadamente, es para mal. Mi peor lectura de julio ha sido Tacones y Mazmorras. A pesar de lo que prometía, no sé si leeré algo más de la autora.
Gema: me propuse leer siete libros; empecé muy bien, pero enseguida desbarré y he hecho lo que me ha dado la gana. Os cuento: empecé el mes Lazos de sangre de Karen M. McMannus, pero un día me dio por ver la serie The Perfeccionists de HBO y recordé que estaba basada en un libro de Sarah Shepard, así que aparqué a los primos y me metí de lleno en Las chicas perfectas y, después, Las chicas buenas. En breve os dejaré por aquí la reseña de esta bilogía.
Mi tercer libro de julio fue La novena casa de Leigh Bardugo. El inicio de la primera serie de adulto de la autora de Seis de cuervos. Una lectura muy interesante, que me tuvo en modo “wtf” en los primeros capítulos y luego mete quinta y ¡hala! A las aventuras (o más bien desventuras de Galaxy Alex Stern) le siguió mi primer libro de Mary Higgins Clark: Asesinato en directo. Es también el principio de una serie (Under Suspicion) y ya tengo el segundo para leerlo en agosto 😃.
Mi mes de julio termina con dos libros muy cortitos y muy diferentes: Un amor cualquiera de Jane Smiley y Las poseídas de Stepford de Ira Levin. Dos lecturas sencillas y rápidas (la segunda se me ha atragantado un poco porque no la encontré en castellano y la he leído en español de Latinoamérica), pero que me han gustado mucho.
¡Ay que se me olvidaba! Empecé una de mis lecturas del TBR, The Little Book of Sloth Philosophy de Jenny McCartney, pero decidí hacer caso a lo que aconseja y leerlo con la mayor tranquilidad (slothididad) posible. Igual lo termino en diciembre.
Así que en resumen: de la lista que os puse, he leído dos (😅), así que el resto: Agatha Raisin y la quiche letal, El cuchillo en la mano y Lazos de sangre se van a la lista de agosto.
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